Las empresas en función de su tamaño y medios económicos y humanos disponibles, pueden recurrir a diversas técnicas que ayuden a fomentar el compañerismo entre los empleados, como son:
- Instalar zonas comunes donde los empleados pueden compartir tiempo realizando tareas diarias como son el propio trabajo, la alimentación, descanso, deporte, etc. En estos espacios se consigue que las personas establezcan lazos distintos a los propios de su puesto en la empresa, al interactuar en otro ámbito.
- Plantear objetivos individuales y colectivos para que el personal además de cumplir con su parte individual, pueda aportar sinergias con otras personas de la empresa.
- Organizar eventos conjuntos. Esta es una técnica que la mayor parte de empresas comparten y posiblemente sea la más antigua porque es accesible tanto a pequeñas como grandes empresas. Su reflejo es el de las comidas anuales, viajes de mayor o menor duración, asistencia a ferias, congresos, etc.
- Participación en actividades que fomenten la integración de toda la pirámide de la empresa, tanto organizativa como personal. El objetivo es encontrar un medio idóneo para alcanzar esos valores de igualdad, compañerismo, respeto a la diversidad, etc.
El deporte permite cubrir la mayor parte de requisitos que se le pide al fomento del compañerismo entre los empleados. Es un medio que cualquier empresa tiene a su alcance, aúna esfuerzos individuales-colectivos y en función de la actividad elegida permite implicar a toda la plantilla.
Si ACEPTAS EL DESAFIO, podrás ver cómo se crean lazos personales, se alcanza mayor empatía entre los participantes y todo esto se convierte en una mejora del compañerismo y del sentimiento de participación en la empresa.